El ejecutivo ha realizado una inversión de 1,7 millones de euros en la adquisición de vehículos 4x4 pick-up y su correspondiente equipamiento para la prevención y extinción de incendios forestales.

El Consejo de Gobierno castellanoleonés ha dado luz verde a la compra de 27 vehículos 4x4 pick-up, además de diversos elementos para su correcta transformación en vehículos especiales empleados para luchar contra incendios forestales. La adquisición se ha efectuado mediante compra centralizada a través del Acuerdo Marco.

Los 27 vehículos han supuesto un coste de más de 1.490.000 euros para la Junta de Castilla y León, que también ha destinado otros 259.000 euros para la adquisición y suministro de componentes derivados a su transformación en vehículos especiales que formarán parte del operativo de prevención y extinción de incendios forestales Castilla y León.

Gracias a su maniobrabilidad y fácil capacidad de acceso en los montes, estos vehículos especiales contra incendios forestales son esenciales para llegar con rapidez a los focos de incendios incipientes y así tratar de evitar su crecimiento y propagación.

Los vehículos suministrados tendrán capacidad de cinco plazas, así como la instalación de un puente de señalización luminoso y acústico de emergencias con preinstalación de emisora. También destaca la equipación de un kit de mejora de ángulos y un kit genérico de imagen corporativa. Estos transportes contarán con bajos reforzados, extintores y ruedas y llantas de repuesto.

Cuando estén disponibles, la intención es llevar a cabo su transformación y equiparlos con los componentes adecuados para trabajar correctamente en su función de batalla contra incendios forestales. Su kit de extinción de alta presión estará equipado con un depósito de agua, motor, bomba, una devanadora, 50 metros de manguera, una lanza y otros útiles que son requeridos para el lanzamiento y la succión de agua. Además, se incorporará una estructura portaherramientas de uso manual. La estructura estará instalada en la caja de los vehículos para alojar los equipos de extinción.

Imagen: Junta de Castilla y León.